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Hasta siempre querido Alberto Crespo
Lamentablemente la noticia nos sorprendió a todos. Repentinamente ayer a los 74 años nos dejó el querido Alberto Crespo, gran técnico, excelente dirigente y un entrañable amigo del automovilismo.
Alberto se crió entre los fierros ya que su padre, Alberto Augusto Crespo, fue además de un gran mecánico, un piloto que no solamente corrió en el automovilismo nacional, también se dio el gusto de correr un Gran Premio de Fórmula 1 en 1952.
Alberto siguió con la tradición de su padre poniendo las famosas "Levas Crespo" en las entrañas de los motores de distintas categorías del país y América.
Además su banco de pruebas fue el recinto elegido por muchos preparadores y pilotos para testear sus autos de carreras.
También en la dirigencia se hizo notar siendo uno de los pioneros del TC2000. Propietario y director deportivo con una coupé Ford Taunus que manejaba Rolando Uriarte en los 80.
Con el tiempo, y su trabajo incanzable, fue dirigente y llegó a la presidencia del TC2000, trabajando codo a codo junto a Juan María Traverso, Tito Bessone, Guillermo Maldonado y Cocho López, en la época más gloriosa de la categoría.
Siempre nos recibía en el Vicente López Automovil Club, sede de las reuniones del TC2000, con una sonrisa, buena predisposición y sobre todo brindando todo lo que la prensa necesitaba.
Hace unos años fundó "Crespo Center" un establecimiento dedicado a la competición, similar a una estructura de Fórmula 1, con toda la tecnología que el automovilismo necesita.
El legado de la familia Crespo tendrá seguramente continuidad con el trabajo de sus hijos Guido y Flavio que heredaron de su padre la tenacidad, bonomía y don de gente.
Querido Alberto!!! te vamos a extrañar. Tus ensenanzas, tu trabajo y tu amor por los autos de carrera nos han dejado muchas enseñanzas.
El automovilismo siempre te recordará con una sonrisa.
