Fórmula 1
Vuelta a las bases
La Fórmula 1 parece comenzar a escuchar los pedidos del público.
Tras la reunión llevada a cabo en París entre la los directivos de la FIA, Liberty Media y los motoristas se determinaron importantes novedades de cara al futuro de la categoría.
Todas las partes llegaron a un acuerdo para abandonar las actuales unidades de potencia V6 turbo híbridas, introducidas en 2014, para volver a motores más baratos y ruidosos a partir de 2021.
La medida, que supone dar marcha atrás al polémico sistema de motores 'verdes', responde a una demanda de los espectadores y los propios pilotos que también satisface a los actuales dueños de la F1, el conglomerado estadounidense Liberty Media.
De la reunión participaron todos los motoristas que actualmente compiten en la F1, además de algunos como el Grupo Volkswagen, representado por Stefano Domenicali.
Aunque la FIA anunció que las negociaciones para aprobar la especificación exacta de los nuevos motores durarán varios años, el máximo organismo mundial del automovilismo emitió un comunicado hoy, anunciando que se ha llegado a un principio de acuerdo. Según la FIA, los motores seguirán teniendo un gran protagonismo en la competición, pero al mismo tiempo se volverán más simples y más baratos de desarrollar. Además, los motores tendrán que mantener altos niveles de potencia, con un mejor sonido y un "deseo de permitir que los pilotos sean más agresivos todo el tiempo". Esto supondría el regreso de la recarga de combustible durante la carrera o, al menos, terminar con las limitaciones que exige la normativa actual sobre el ahorro de combustible, que impone un límite de gasolina de 105 kilogramos en carreras.
"Estoy muy satisfecho con el resultado de la reunión y el hecho de que tantos actores diferentes se hayan puesto de acuerdo en un área técnica tan importante", dijo el presidente de la FIA, Jean Todt. "Por supuesto, ahora debemos sentarnos y cerrar los detalles de cómo serán las unidades de potencia en 2012, pero hemos empezado con buen pie", concluyó.