Otras
¿Cómo será el próximo GEN2 de la Fórmula E?
Este fin de semana terminará una época inicial de la Fórmula E y de inmediato estará comenz<ando otra: la de los nuevos autos GEN2, que correrán en la próxima temporada. En las calles de Nueva York será la despedida de los actuales.
Muchos se han sorprendido por el ‘Gen2’, el auto de segunda generación que será empleado por la Fórmula E a partir de su próxima temporada. Más que nada por las líneas futurísticas del coche. El GEN2 rompe muchos esquemas y mientras ven en este monoplaza el anticipo del camino que tomará la F1 otros niegan el ser una fórmula porque no es un cockpit abierto. En realidad este coche es el anticipo o el adelanto del futuro. Impacta en muchos aspectos, pero sobre todo es un vehículo diseñado para una función concreta: imagen de futuro, imagen verde, drag mínimo y eficacia en los tortuosos circuitos urbanos.
Los favorables al GEN2 lo ven 'inspirado' en algunos diseños futuristas de la F1, tanto los mostrados por algunos diseñadores independientes como los realizados por algunos equipos cuando les pidieron bocetos de como veían los F1 de 2030.
Da una imagen de lo nuevo, de lo moderno, de lo avanzado, muy de acuerdo con la filosofía de la Fórmula E. Pero las elecciones, obviamente, van más allá de consideraciones de 'imagen'.
Otros denigran sus conceptos y le niegan el derecho a ser considerado como un fórmula. Las ruedas delanteras carenadas y las traseras semicarenadas. Lo ven como una traición a lo que es un verdadero fórmula.
Este nuevo Fórmula E parece más inspirado en un prototipo de Le Mans que en un F1 por lo que a la aerodinámica se refiere. La presencia del halo contribuye a dar una impresión de cockpit cerrado.
El ala delantera, de futurista fórmula no parece generar gran carga. Ni siquiera tiene alerón trasero propiamente dicho y los planos que podrían considerarse como ala están inclinados, formando una V espectacular. Todo indica que desde el punto de vista de la 'downforce' depende básicamente de la parte inferior del coche, del 'efecto suelo' y su difusor. Como si el concepto de partida fuera el mismo que el del futurista Delta Wing o el Nissan Zerod de Le Mans.
El gran objetivo es reducir al máximo el 'drag' no tanto para mejorar velocidades punta sino también para disminuir el consumo energético al máximo porque en la temporada 2018-2019 ya no se cambiará de coche, sino que se hará toda la distancia de carrera con el mismo. Además se quiere que en la recta principal del circuito se pueda rozar los 300 kilómetros/hora. Es decir que la capacidad de almacenar energía de las baterías será duplicada con respecto a las actuales y la potencia de los motores crecerá hasta los 250 kilovatios, es decir casi 50 kilovatios más que los actuales en configuración de clasificación y 220 kilovatios para la carrera en lugar de los 180 actuales Ello les permitirá alcanzar, incluso superar, los 300 kilómetros/hora.
Los diseñadores del auto afirman que el nuevo Fórmula E hará más fáciles los adelantamientos. Las ruedas carenadas tienen también otro efecto: mejorar la seguridad. Debería hacer más difícil que engranen con las ruedas de otro coche y uno de ellos salga volando. No se trata sólo de proteger al piloto sino también al público teniendo en cuenta que los circuitos son urbanos.