Opinión
El fallecimiento de Picardi deja mal parada a la COPAM
El mundo del automovilismo argentino vivió un domingo triste por el fallecimiento de Alfredo "Pappo" Picardi producto de las lesiones que sufrió luego de un fuerte accidente durante la quinta fecha de la categoría Amigos Fiat 1.4 que se desarrolló en el autódromo de La Plata.
- El fallecimiento de Picardi deja mal parada a la COPAM
La COPAM, Comisión Nacional de Automovilismo y Motociclismo, organismo que depende de la Subsecretaría de Deportes de la Provincia de Buenos Aires a cargo de Leandro Lurati deberá enfrentar las responsabilidades correspondientes tras los tristes acontecimientos del pasado fin de semana cuando en un accidente perdió la vida el piloto de la categoría Fiat Amigos 1.4 en el Autódromo Roberto Mouras de La Plata. El evento en cuestión contó con el aval de la ACTC y de la Federación a través del acta que se firmó el pasado 10 de julio y que posee la firma de sus representantes, entre ellos la de Oscar Milani como responsable de la Federación Metropolitana que recientemente pasó a ser fiscalizada por la ACTC.
Consideremos que en esta actividad deportiva de alto riesgo, siempre hay chances de que suceda lo que nadie quiere y un piloto pierda la vida. Mientras avance la investigación para saber que sucedió y si estaban tomadas todas las medidas de seguridad correspondientes, hay otra parte de este conflicto que muchos no tienen en cuenta y que es muy grave. Con el cambio de fiscalización, los organizadores del evento en este caso ya no cuentan con el Poder Deportivo otorgado por la CDA del ACA, por lo que deja a los responsables desprotegidos ante los reclamos legales que pudieran surgir así como la posibilidad de que los aseguradores del evento no respondan en este caso.
El conflicto entre fiscalizadoras en el automovilismo argentino puede llegar en breve a la justicia ordinaria y son estas situaciones las que muestran cuales son los efectos de estar desprotegidos y no contar con el respaldo que delega la FIA a través del ACA para esta actividad. Elegir quien te fiscaliza es mucho más complejo de lo que muchos manifiestan. No es una cuestión de quien me trata mejor, de si este comisario deportivo es mejor que el otro, de si me dejan hacer más o menos cosas en el autódromo, sino que es ni mas ni menos que contar con un respaldo frente a situaciones adversas y un soporte a la hora de hacer valer los reglamentos.
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