Fórmula 1
F1: Austria y una verdadera carrera de otro mundo
En plena pandemia del Covid-19, la máxima categoría decidió dar comienzo a su campeonato 2020 en un contexto que al día de hoy, parecen sacados de una película.
Tras suspenderse el comienzo de la competencia en marzo del 2020, la Fórmula 1 se puso en marcha cuatro meses después en el Gran Premio de Austria, en medio de miles de casos positivos de Coronavirus y sin público en las tribunas debido al estricto protocolo sanitario.
En ese entonces, la vacuna para prevenir el coronavirus no existía. Los pilotos, mecánicos, jefes de equipo, y todos los integrantes de la comitiva que lleva la Fórmula 1 a cada competencia, tenían que protegerse solamente con un barbijo en su rostro y manteniendo una distancia de dos metros en el paddock.
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Asimismo, las medidas que se habían tomado en aquel entonces para las únicas personas que podían estar en el recinto, era la realización de hisopados constantes para todos y un máximo entre 2.000 y 3.000 personas en todo el Red Bull Ring, autódromo en el cual se desarrolla el gran premio austríaco.
En aquel campeonato, la escudería Mercedes partió como máximo favorito debido al título conseguido en la temporada 2019 de la mano del británico Lewis Hamilton que, además, iba en busca de su séptimo título para alcanzar el récord del alemán Michael Schumacher, algo que terminaría sucediendo al final del mismo.
El primer ganador, tras el retorno por la pandemia, fue Valtteri Bottas con el Mercedes número 77, cuando formaba parte de la escudería alemana. Y al finlandés lo escoltaron el piloto monegasco Charles Leclerc con Ferrari y el británico Lando Norris con Mclaren, que consiguió su primer podio en la Fórmula 1 en esta carrera debido a la penalización de cinco segundos que recibió Lewis Hamilton por un toque con Alexander Albon, que en ese entonces competía con Red Bull.
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Dos años después, la Fórmula 1 correrá una vez más en el Red Bull Ring, en el marco de la décima fecha de su campeonato 2022 y con un contexto completamente diferente al de aquel entonces. Con Ferrari y Red Bull como máximos favoritos, el público austriaco disfrutará de una nueva carrera de la máxima categoría, pero esta vez, alentando desde las tribunas del autódromo.
