Otras
La FIA condena y alerta a la Argentina
La Federación Internacional del Automóvil (FIA), la máxima entidad mundial de autos en el planeta, emitió un comunicado para condenar y alertar a la Argentina. A través de la Región IV del organismo rector, se anticipa y muestra su oposición al posible retraso de la implementación obligatoria del control de estabilidad (ESP) en los vehículos nuevos en el país a partir de enero próximo.
“Podría significar la pérdida de vidas de muchos argentinos”, indicó la FIA ante la factible postergación del uso obligatorio. En 2013, el Gobierno argentino dispuso la obligatoriedad del control de estabilidad para los vehículos lanzados a partir de 2018. Sin embargo, tras un acuerdo entre el Gobierno actual y la Asociación de Fabricantes de Automotores de la Argentina (Adefa), la decisión se pasaría a 2020.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) había recomendado en 2012 integrar el sistema ESP en la fabricación de automóviles en todo el planeta, como forma de reducir los altos índices de siniestralidad que se arrojan en buena parte del mundo.
Si bien aún no se anunció de forma oficial esa posible prórroga, en el medio automotor ya se da como un hecho esta decisión. Es por ello, que la FIA emitió en las últimas horas el siguiente comunicado, titulado “La demora en la implementación del control de estabilidad aumentará los muertos en accidentes de tránsito en Argentina”.
El texto indica: “En la actualidad en la Argentina todavía se encuentra en discusión la implementación obligatoria del Control Electrónico de Estabilidad (ESP, por sus siglas en inglés), un dispositivo que puede evitar hasta un 80% los accidentes provocados por la pérdida de control de un vehículo. También llamado control dinámico, se acciona automáticamente en el momento de realizar una maniobra imprevista, lo que habitualmente llamamos un “volantazo”, quitando potencia al motor y utilizando el freno de forma independiente en distintas ruedas para evitar derrapes y vuelcos.
“El ESP fue recomendado en 2012 por la Organización Mundial de la Salud (OMS), para ser integrado en la fabricación de automóviles en todo el mundo. En nuestro país en el año 2013 principales automotrices firmaron un acuerdo mediante el cual se comprometieron a implementarlo a partir del mes de enero de 2018, con el objetivo de reducir accidentes y salvar vidas. Esta normativa abarcaría la inclusión obligatoria en los vehículos 0km que ya se comercializan en el mercado. Lamentablemente hoy en día la industria automotriz, generalmente considerada pionera en la innovación tecnológica, es reticente a los cambios y al parecer prefiere evitar su implementación definitiva. ‘Mientras sea opcional, los consumidores deberán pagar por su seguridad. Al ser estándar, estaría incluido en el precio de compra de cualquier vehículo’, explica Ricardo Morales Rubio, Presidente del Directorio de Latin NCAP.
“¿Cómo funciona este mecanismo de emergencia? ‘Incorpora sensores de velocidad de giro en las ruedas que trabajan con el ABS (sistemas de frenos antibloqueo) y un sensor de dirección que registra la dirección deseada por el conductor al girar el volante y de esa forma detectar qué maniobras son imprevistas y activarse para corregir su trayecto’, comenta Pablo Azorín, Jefe de Seguridad Vial y Medio Ambiente de FIA Latinoamérica. También el sensor de ángulo de giro ‘proporciona información sobre desplazamientos del vehículo cuando el mismo comienza a derrapar o al perder la trayectoria deseada por el conductor’, agrega. Con este dispositivo de fábrica, es posible evitar riesgos y mantener el control del vehículo ante una eventualidad. Su costo junto al ABS es de aproximadamente u$s 60,00.
“La fundamentación de esta posible e inadecuada decisión de su postergación es que el mercado brasileño prevé la puesta en funcionamiento obligatoria del ESP a partir de 2020, por lo que la demora les ayudaría a continuar sus intercambios comerciales con el país vecino. Según estimaciones, la nueva reglamentación se pondría en vigencia recién en enero de 2022 y no en 2018 como estaba previsto.
“Por el bien de los argentinos y de todos los consumidores de la región, esperamos que la postergación sea un rumor y que Argentina se mantenga en línea con los planes de la Década de Acción para la Seguridad Vial y las metas de sustentabilidad de la ONU estipulados para salvar vidas”, opinó al respecto Alejandro Furas, Secretario General de Latin NCAP.
“La importancia de la seguridad vial y el compromiso en la prevención de muertes por accidentes de tránsito parece estar ausente en estos debates en nuestro gobierno. La industria automotriz debe ser consciente de las implicancias de este cambio y las autoridades argentinas como la Agencia Nacional de Seguridad Vial ‘deben entender la importancia que tiene una tecnología de seguridad que ayuda al conductor en situaciones adversas y salva casi tantas vidas como el cinturón de seguridad’ sostiene Leandro Perillo, Gerente de Movilidad y Políticas Públicas de FIA Latinoamérica. Frente a esta situación y con recientes comunicaciones del gobierno que efectivizarían dicho aplazamiento de cuatro años, ‘consideramos preocupante que el interés económico de unos pocos se pondere por sobre la seguridad y las vidas de miles de argentinos, incluso en contra de las tendencias en todo el mundo’, agrega."