Límite de Pista
"Andor", la serie de Disney+ que trajo a "Star Wars" a la primera plana otra vez
En la siguiente nota, repasa una de las notas tendencia de la plataforma Disney+.

La serie de "Andor" no es solo una precuela de "Rogue One"; es la prueba definitiva de que el universo de Star Wars puede, y debe, ir más allá de los sables de luz y los blásters. Creada por Tony Gilroy, esta serie de Disney+ es un thriller de espías y un drama político que profundiza en los orígenes de la Alianza Rebelde con una madurez y un realismo sin precedentes. Es, para muchos, la mejor producción de la saga en la era de Disney.
La historia se centra en Cassian Andor (un brillante Diego Luna), un hombre cínico y pragmático que vive una vida de bajos vuelos en el borde de la galaxia. La serie no lo glorifica de inmediato; en cambio, nos lo presenta como un ladrón y un superviviente. Es a través de una cadena de eventos, que comienzan con un encuentro fortuito y terminan en una huida desesperada, que Cassian se ve obligado a elegir. No se trata de una elección entre el bien y el mal, sino entre el sometimiento y la lucha por la libertad.
Lo que distingue a "Andor" es su enfoque en los pequeños detalles. No hay saltos de galaxia a galaxia sin una razón. Cada escena está meticulosamente construida para mostrar cómo funciona el Imperio Galáctico: no con una Legión de Stormtroopers, sino con la burocracia opresiva, los abusos de poder y la vigilancia constante. La serie nos muestra el miedo cotidiano y cómo se convierte en el combustible de la rebelión. La vida en Ferrix, un planeta polvoriento y oprimido, es tan tangible y real que nos hace conectar con la lucha de sus habitantes.
El elenco de apoyo es excepcional. Stellan Skarsgård como Luthen Rael es un maestro de la interpretación, y su monólogo sobre el sacrificio es uno de los momentos más memorables de la televisión moderna. Adria Arjona brilla como Bix Caleen y Mon Mothma (Genevieve O'Reilly) se revela como una figura política compleja y fascinante. La serie no necesita cameos para sostenerse; su fuerza reside en sus personajes, en sus diálogos inteligentes y en la tensión constante que se construye sin necesidad de acción espectacular. Es una pieza de ciencia ficción que resuena con la realidad, una reflexión sobre la tiranía y la resistencia que demuestra que Star Wars puede ser tanto un cuento de hadas espacial como un drama adulto y relevante.