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Renault Fuego, la cupé más deseada, cumplió 40 años
La cupé Fuego cunple 40 años.
Uno de los autos más destacados de la década del 80 en el país y uno de los autos deportivos más recordados de todos los tiempos.
Nació sobre a base del Renault 18, pero con identidad propia, ya que impactó mucho más que la versión deportiva del 18.
La Fuego tenía atributos de sobra para ser un auto con estilo y con el tiempo de fabricación nacional por lo cual le daba un plus.
En 1980, Robert Opron y Michel Jardin, fueron los diseñadores de un auto que enamoró como pocos a cientos de miles de usuarios en la Argentina.
Estos diseñadores imaginaron aquella luneta arriesgada y delinearon una silueta altamente seductora para la época.
La Fuego llegó a la Argentina proveniente de su cuna, Francia, en 1981 y un año después ya se fabricaba en la plata cordobesa de Santa Isabel.
En europa se discontinuó en 1985 pero en nuestro páis fue tanto el éxito que duró hasta 1992 y algunas se patentaron en 1993.
Además de su diseño y performance logró imponerse por una buena relación precio-producto.
Era un auto deportivo accesible, no económico, pero estaba al alcance del que buscara un deportivo de excelencia.
Una línea deportiva muy atractiva y osada, con la recrdada moldura de plástico negro que la recorría a la altura de la cintura en todas sus versiones, salvo la GTA.
La GTX de los primeros años venía con un motor 2 litros y 103 hp con caja de 5 velocidades.
La cupé venía con cierre centralizado, levantacristales eléctricos, tapizado de cuero, aire acondicionado y un volante estéticamente perfecto que se hizo famoso por utilizarse en los vehiculos de competición de la mayoría de las categorías nacionales.
El primer restayling llegó en 1986, se llamó Fuego GTX II.
Por fuera solo cambiaron las llantas, mientras que en el interior, el tablero pasó a ser visera larga, recibió nuevo intrumental y cierre centralizado con comando a distancia.
En 1987 apareció la GTX II 2.2 la cual venía con motor de 2.2 litros con 116 hp. pasando a ser el primer auto nacional con frenos a disco en las cuatro ruedas. También se le modificó la parrilla y tenía llantas de 14" y se le agregó computadora de a bordo de ocho funciones.
La Fuego siguió evolucionando en nuestro país y a fines de 1988 se vino el rediseño. Encargado a un estudio californiano el diseño sufrió un refresh en casi todo el auto.
Así nacía la Fuego GTA con parrilla, faros, espejos, spoiler, paragolpes, llantas y butacas nuevas, agregando comando satelital detrás del volante.
En 1991 el motor aumentó la potencia a 123 hp. por lo cual pasó a llamarse Fuego GTA Max, que era similar al modelo anterior pero con doble salida de escape, tercera luz de stop, el volante cambió su diseño a uno de tres rayos y sumó alarma volumétrica.
Un deportivo que marcó una época gracias a su performance y su confort interior, pero con el valor agregado de ser un auto nacional.
En el plano deportivo arrasó en el TC2000 de la mano de Oreste Berta logrando ser campeón en ocho oportunidades desde 1986 hasta 1993.
Las hazañas de Juan María Traverso con la Fuego quedarán por siempre en la historia con sus seis campeonatos logrados, como así también los del recordado Silvio Oltra (1987) y Miguel Angel Guerra (1989).
