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ADIÓS A LOS AUTOS A COMBUSTIÓN
Los automóviles tradicionales, a combustión, ya sean nafteros o diesel, tienen fecha de defunción. Al menos esto se desprende de la serie de anuncios que en las últimas semanas se realizaron por parte de gobiernos y de automotrices, principalmente en Europa, que le da vía libre a los vehículos a energía renovables.
Un día después del sorpresivo anuncio de Volvo, que sentenció que dejará de fabricar automóviles que funcionen exclusivamente a combustión interna, el gobierno de Francia se sumó a esta “ola Verde” y lanzó un plan quinquenal para promover la energía limpia, según lo pactado en el acuerdo climático de París, por lo que el ministro de Asuntos Ambientales, Nicolas Hulot, afirmó: “La industria automotriz de nuestro país está en condiciones de dejar de fabricar autos a combustión para darle paso a las nuevas energías”.
La postura de Francia se suma a la de Alemania, que se propuso contar con un millón de autos eléctricos para 2020, mientras que en Holanda se aprobó la propuesta del Partido del Trabajo para prohibir la venta de los automóviles tradicionales a partir de 2025.
Se trata de una "verdadera revolución", pero "las condiciones están reunidas", añadió el ministro francés, que agregó: "Nuestros propios constructores (de automóviles) tienen cómo alimentar y encarnar esta promesa (...) que es además una cuestión de salud pública".
Las automotrices Peugeot, Citröen y Renault encabezaron en 2016 una lista sobre los grandes constructores que generan menos emisiones contaminantes, según la Agencia Europea de Medioambiente. La empresa PSA Group (Peugeot y Citröen) se mostró a favor de la nueva propuesta, ya que dentro de sus objetivos es que el 80 % de sus vehículos sean eléctricos o híbridos para el 2023.
De todas maneras, si Francia y gran parte de Europa prohíben la venta de los vehículos a combustión, PSA continuará fabricando esas máquinas para consumo externo, según adelantó la vocera de la compañía, Laure de Servigny.
¿Qué pasa en la Argentina? En las últimas semanas se anunció la baja arancelaria a los vehículos híbidos o eléctricos, para incentivar su uso, mientras que la petrolera YPF instalará cargadores en varios puntos de venta para abastecer a esas nuevas máquinas que comenzarán a circular en el país.