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Un Ford enterrado en un jardín
En Inglaterra un hombre arreglaba su jardín y se encontró con un Ford enterrado en el fondo de su casa
John Brayshaw, vecino de la localidad de Heckmondwike en Inglaterra, decidió aprovechar estos días de confinamiento para dedicarse a reacomodar su jardín.
El hombre llevaba apenas seis meses viviendo en su casa y no había prestado demasiada atención al jardín trasero de la misma.
La historia empezó cuando John hundió la pala y empezó a cavar y se encontróm con algo sólido, oh sopresa!!! resultó ser: ¡un auto!.
Concretamente, el inglés encontró un Ford de los años 50, que estaba enterrado en su jardín.
Mr. Brayshaw no dudó en iniciar una investigación al respecto.
Gracias a la publicación de la noticia en los principales medios digitales y tabloides británicos, se pudo conocer a una de las personas que viajó en este Ford Popular 103e de 1955-56.
El automóvil en cuestión perteneció a un veterano de la Segunda Guerra Mundial llamado Harold Lyles, quien residió en la casa de Brayshaw durante años y aunque éste murió en 1987,
mucho antes, en 1964 y con la ayuda de un hermano suyo que era constructor, decidió enterrar el auto en el jardín esperando que alguien muchos años después descubriera el automóvil y
tuviera acceso tanto al vehículo como a una serie de objetos de la época situados en su interior, tales como una radio de la década de los 40, una botella de leche u otra con parafina.
Así lo contó hoy en día su viuda, quien a los 91 años reconoce que "se rió como una loca cuando escuchó por primera vez que alguien había encontrado el coche enterrado".
No se sabe qué hará este buen señor con semejante hallazgo, seguramente tendrá que usar maquinaria pesada para desenterrarlo por completo si alguien se ofrecía a recomponerlo o restaurarlo.
